No es lo mismo la voluntad que la realidad. Pero, al parecer, el ministro de Energía y Minas, Jorge Merino, no parece distinguirlo, pues durante la inauguración de la 31 Convención Minera aseguró que se ejecutarán los proyectos mineros Conga (Cajamarca) y Tía María (Arequipa), pese a la oposición social que aún existe contra ambos proyectos.

Si bien el Gobierno parece decidido a restablecer la confianza alicaída del sector empresarial,  no parecen existir razones contundentes que cimienten las afirmaciones del ministro.  

Conga es un proyecto minero que demanda una inversión de unos US$4,800 millones, y constituye a la par de un proyecto emblemático para el sector minero, el Talón de Aquiles de este Gobierno, pues lleva dos años paralizado.

Y Lejos de atenuarse la aspereza de las poblaciones aledañas al desarrollo del proyecto, las manifestaciones en contra han continuado en los últimos meses. 

El último gran episodio se produjo a raíz de la intención de la empresa de construir el segundo reservorio en la Laguna El Perol. Las comunidades aledañas se movilizaron para impedir dicha construcción y todo decantó en un enfrentamiento entre los comuneros y los agentes de la policía. 

Del mismo modo, a finales de agosto los ronderos y dirigentes comunales de Hualgayoc, Sorochuco y Celendín incursionaron en inmediaciones de las lagunas aledañas al proyecto para retirar por la fuerza tranqueras o controles de acceso al proyecto aurífero.

Pero para Merino, las relaciones entre Yanacocha y las comunidades ha mejorado debido a que la empresa está cumpliendo con lo ofrecido no solo con la construcción del reservorio de agua Chailhuagón, sino con iniciativas de desarrollo en la zona de influencia.

“Estamos confiados en que con este nuevo relacionamiento que está haciendo la empresa Newmont-Yanacocha con las comunidades, Conga también se desarrollará”, dijo.

Destrabar Tía María

En el caso de Tía María el terreno no parece más despejado. La empresa Southern Perú, que ejecuta el proyecto, ha señalado que trabajarán una nueva propuesta para lograr la aprobación del Estudio de Impacto Ambiental (EIA).

Pero este proyecto también cuenta con la oposición de las jurisdicciones afectadas, razón por la cual en abril del 2011 el gobierno central paralizó la presentación del citado documento. 

“El tema del agua es clave en Tía María y Southern Perú va considerar el agua de mar en los estudios de impacto ambiental, es un gran paso; estamos seguros que este será uno de los grandes proyectos en desarrollo”, afirmó Merino.