Una de las principales promesas del actual presidente de México, Enrique Peña Nieto, fue garantizar la transparencia del gobierno. Sin embargo, una propuesta de los diputados de su formación, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), podría poner en peligro sus palabras.

La Cámara de diputados mexicana aprobó una serie de modificaciones sobre la Ley de Transparencia de México, una de las más avanzadas del mundo y que garantiza a los ciudadanos el derecho a requerir información. Se trata de una ley basada en la rendición de cuentas y la supervisión ciudadana y que ha servido de ejemplo a otros países de la región por su avance. Así ocupa el sexto puesto de transparencia en un listado de 95 países, según un estudio del Centro para la Ley y Democracia de Canadá difundido este año.

La modificación propuesta por el PRI restaría autonomía al Instituto Federal de Acceso a la Información (Ifai) -organismo que garantiza el derecho de acceso de las personas a la información pública gubernamental- en “seguridad, estabilidad económica y derechos humanos”. Esto impicaría que cualquier petición de información por parte de los ciudadanos que se ajuste a alguno de esos temas puede ser llevada por la dependencia gubernamental a la Corte Suprema mexicana. 

La polémica saltó por la existencia de un primer borrador presentado por Peña Nieto que buscaba una mayor apertura de información y que el Senado desarrolló para que fuera aprobado por la comisión de la Cámara baja. Sin embargo, posteriormente el documento sufrió modificaciones en un proceso “poco claro, cerrado, sin información disponible oportunamente y sin consultas públicas y abiertas”, según indicaron las ONG México Infórmate y Colectivo por Transparencia en un comunicado.

Las organizaciones y expertos en rendición de cuentas mexicanas advierten que es mejor no dejar al Ifai "ciego y sin dientes" y recomiendan no aplicar la propuesta  porque "abre el camino para que crezca el uso abusivo de las causales de reserva y aumenten las zonas de opacidad". 

Por su parte, el propio secretario general del Ifai, Juan Pablo Guerrero, cuestionó los cambios promovidos por el PRI.  La medida implementada es "inexplicable, absurda, porque al final los integrantes del pleno, con un enorme apoyo técnico de áreas jurídicas, sacan sus resoluciones", señaló.

Ahora, para que los cambios sean efectivos, falta que las reformas aprobadas por la comisión de la Cámara de diputados destinada al tema sea ratificada en el Senado. 

Con información de El País, La Jornada, El Universal

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