Perú es un equipo con algunas cosas buenas como malas. El partido contra Corea del Sur deja muchas lecciones y, entre las más importantes, es que no nos hagan gol cuando un equipo nos presiona, nos ahoga y elimina a nuestros volantes, Luis Ramírez y Rinaldo Cruzado. A veces el mal juego puede ser una opción para Perú, por más feo que suene. 

Así juega Uruguay, como Corea, a ese ritmo y, mientras los celestes le ganan 4 a 2 a Japón, hoy nos ha costado mucho el partido contra a los asiáticos. 

Raúl Fernández ha demostrado que se ha ganado el puesto. ¿Podemos imaginar la selección de Markarián sin Raúl en el arco? Difícil. Hoy sacó 7 pelotas claras y es el gran responsable del 0 peruano.

La defensa es otra historia. Los laterales peruanos no pueden hacer el recorrido. Sí, la marca de Advíncula y Yotún fue importante, pero cuando se les necesita en labores de ataque, muy raras veces llegan. Además, casi todas las situaciones de gol de primer tiempo llegaron por el lado derecho peruano, desde centros hasta faltas, y Advíncula no estuvo bien en este último tramo.

Por eso, si fallan los lados, es complicado que la volante funcione. Eso fue lo que pasó en el primer tiempo. Si Advíncula y Yotún no juegan con Ramírez y Cruzado, es difícil que estos puedan conectar, pues las marcas de los coreanos era muy intensa y no dejó pensar a los creativos peruanos. 

Quizá Markarián pensó en este rival pues Uruguay tiene un juego relativamente parecido. Cavani y Suárez nunca dejan jugar a los centrales rivales y la presión dura todo el partido. Por eso, las lecciones de hoy son muy importantes para nuestra final para lograr el repechaje.

En el segundo tiempo, los cambios de Markarián permitieron que el partido se equilibrara. El partido a Reimond Manco le quedó muy grande. El jugador de UTC no tuvo espacios, no tuvo mucha marca y, aunque generó un par de faltas, es difícil analizar su juego pues le llegó y buscó muy poco el balón ante un rival difícil.

Por ello la entrada de Paolo Hurtado fue interesante. El 'caballito' da explosión, marca y es una posibilidad de juego amplio para Farfán, que también entró y jugó más por dentro, juntándose con Edison 'oreja' Flores -que reemplazó a Reimond- y demostró que tiene un futuro muy prometedor. 

Entre Farfán, Hurtado, Pizarro y Flores, Perú armó juego por el centro y la entrada de Álvaro Ampuero también le dio un poco de amplitud por el lado izquierdo. Las preguntas surgen si Perú frente a Uruguay apostará por un juego más amplio y bloqueando al 'cebolla' Rodríguez y Diego Forlán con un contención como Edwin Retamoso o si jugaremos con los cuatro arriba -con el reemplazante de Juan Manuel Vargas- y tendremos mayor potencia y presencia arriba.

Y esto surge pues cuando sale Retamoso y entra Carlos Lobatón, Perú empieza a tener la pelota y jugar. Necesitamos tener la pelota. Somos un equipo que se defiende con ella. No podemos esperar a Uruguay porque se vienen encima y no tenemos marca en el centro. Si un equipo nos ahoga, nos complica. Tenemos un gran arquero -que es vital para las aspiraciones del repechaje- pero necesitamos más que eso para aguantar a los 'charruas'. 

Paolo Guerrero es un delantero de otro nivel, pero cuando está metido. Hoy tuvo un partido táctico en términos de marca y cansó tanto a los centrales, que también parecían ahogados en el minuto 60. Lo mismo con Pizarro, un delantero que se convierte en diez, en un armador de juego, y sale del área  a ordenar y pintar un poco el juego. 

Pero volvamos a los centrales. Entre Ramos y Álvarez le dieron más de un problema a Fernández, al punto de que un coreano le pateó...¡en el área chica!

Al final, el partido deja muchas lecciones, buenas y malas, y llegamos al partido contra Uruguay con 42 encuentros bajo el mando de Markarián. Se han ganado jugadores y existen ideas. Existe contenido futbolístico, pero terminamos muy complicados cuando bloquean a Ramírez y Cruzado. Eso, sumado al desorden de los laterales, podría ser muy difícil de corregir frente a Uruguay. ¿Tenemos alternativas en ese sentido? Juan Carlos Mariño nos salvó la vida contra Chile. La sorpresa es un factor que el 'Mago' ha manejado bien, el punto de que estamos a dos puntos de zona de repechaje.

Son días de sufrimiento los que se vienen.

No por el partido de hoy, que es una muestra de cómo juega realmente Perú, sino porque pareciera que a nuestra selección los rivales ya le han dado la vuelta de tuerca y saben dónde están nuestros pasivos.

Son días de sufrimiento los que se vienen.

No por el juego peruano, que es positivo cuando tenemos la pelota.

Son días de sufrimiento los que se vienen.

Pues el rival a eliminar es Uruguay.