La población brasileña sale de nuevo a las calles. Las protestas que el mes pasado reunieron más de un millón de personas en las diferentes ciudades brasileñas vuelven a ganar intensidad con la visita del papa Francisco a Río de Janeiro. 

Y es que el descontento social continúa. El debate sobre el uso de recursos públicos para costear parte del evento está en la orden del día. El mes pasado, se registraron grandes manifestaciones que criticaban el aumento del costo de transporte en varias ciudades y los enormes gastos públicos en estadios para el Mundial de fútbol, entre otros, en un país con problemas en temas tan básicos como salud y educación.

Ahora llega la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) católica, evento que convoca a cientos de miles de fieles de todo el mundo. Eso sí, este evento no se paga solo. Según los organizadores, el costo total del mismo oscilará entre US$143 millones y US$156 millones ¿Quién lo paga? Por el momento las autoridades han gastos públicos relacionados con la JMJ equivalentes a casi US$ 73 millones, según informa el diario O Globo. 

El costo de la organización de la Jornada Mundial de la Juventud oscila entre 143 y 156 millones de dólares

Por ello, la noche del lunes se desarrollaron enfrentamientos entre policías y manifestantes cerca del Palacio de Guanabara, donde tuvo lugar la ceremonia oficial de bienvenida del papa Francisco, en la que participaron la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, y otras autoridades. El resultado: Ocho personas heridas y siete detenidas

Durante la protesta, con gritos contra el gobernador de Río de Janeiro, Sérgio Cabral, los manifestantes, unas 1500 personas según la policía, quemaron un muñeco que lo representaba e hicieron otras hogueras en la calle.

La policía dispersó con balas de goma y gas lacrimógeno a los manifestantes tras el enfrentamiento, ocurrido en una de las calles bloqueadas por los efectivos para impedir la llegada al Palacio, que es la sede del gobierno regional, según testificó un periodista de Efe.

Así, un fotógrafo de la Agencia AFP y otro de Globo recibieron impactos de objetos en la cabeza, y un manifestante resultó herido por causa de un tiro con una bala de goma en la pierna, según la propia Policía Militar.

Los derechos de los homosexuales

Un grupo de dos mil personas se reunió en frente del estadio de fútbol de las Laranjeiras para defender los derechos de los homosexuales.  El evento, coordinado por las redes sociales, comenzó en la plaza Largo do Machado, con representantes del movimiento LGBT, que realizaron una protesta en las escalinatas de la iglesia Nuestra Señora de la Gloria. 

Allí organizaron "un besazo gay", entre homosexuales, y algunas mujeres se quitaron la parte superior de la ropa como forma de protesta, lo que molestó a peregrinos que estaban en el lugar, aunque no hubo enfrentamientos.

"La Iglesia discrimina a una parte significativa de la población por ser quienes son (las mujeres, las lesbianas, gays, bisexuales, travestis y transexuales)", dice un folleto publicado en el perfil del movimiento en Facebook.

Con información de Efe, Reuters, O Globo

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