La noche de ayer 17 de julio alrededor de un millar de ciudadanos se concentraron en la Plaza San Martín en protesta contra la decisión del Congreso de la República de elegir, en bloque, a cuestionados personajes para ocupar cargos en las más importantes instituciones de defensa del ciudadano, control constitucional y política monetaria.

Desde la histórica Plaza, varios grupos intentaron avances que fueron contenidos violentamente por la policía, que usó gases lacrimógenos y varas para repeler a los manifestantes, produciéndose choques en las entradas del jirón de la Unión y la avenida La Colmena -en dirección a la avenida Abancay. 

Tras cerca de media hora de mantenerse el cerco policial, un grupo abrió paso por la avenida La Colmena -en dirección a la avenida Wilson- y en una carrera de varias cuadras, alcanzó el jirón Camaná, donde desplegaron banderas y pancartas y marcharon contra el tránsito vehicular, poniendo en aprietos a la Policía, que tardó varios minutos en formar un cordón que controle el avance.

Manifestantes dispersos consiguieron entrar a Plaza de Armas, donde fueron atacados con varas, gases y escudos policiales. Los agentes no lograron manejar la situación y se vieron forzados a desalojar la Plaza, en momentos en que en el Patio de Palacio de Gobierno se realizaba un concierto coral con escolares y autoridades educativas. 

Las suaves canciones del coro de niños se interrumpieron por un joven que avanzó hasta las rejas de Palacio de Gobierno gritando consignas traídas desde Plaza San Martín ("No a la repartija", "Congreso Nacional, vergüenza nacional"). Fue detenido por la policía y liberado tras un altercado que involucró a periodistas y ciudadanos provistos de cámaras digitales y teléfonos celulares.

Los manifestantes, finalmente, se reagruparon en diversos puntos guiados por una directiva murmurada o transmitida en sms, tuits y dm's: la Defensoría del Pueblo. No llegaron todos, y los que llegaron fueron recibidos con lacrimógenas y el cachoso cañoncito de un rochabús. Por cerca de diez minutos, se produjeron aún algunas estampidas, que terminaron con un último suspiro en el punto de origen, Plaza San Martín. Allí, se pactó una nueva cita: salir, más organizados, el 27 de julio.

Nuestro reporte de anoche: 

Jóvenes protestaron contra repartija en el Congreso