Los días miércoles y jueves, representantes de Corea del Sur y Corea del Norte celebrarán un "encuentro gubernamental" orientado a resolver asuntos urgentes, como el cierre del complejo de Kaesong, y acercar posturas tras meses de tensión. El lugar de la reunión sería Seúl, donde las autoridades norteñas llegarán por tierra cruzando la frontera del paralelo 38.

Lo que no se ha acordado son las posturas sobre la agenda y las autoridades que participarán. Debido a ello, las Coreas "redactarán dos comunicados separados que reflejen sus posturas sobre los temas a incluir en la agenda y quiénes deben liderar las respectivas delegaciones", indicó a Efe una portavoz de Unificación. 

Corea del Sur pidió al Norte que la reunión del miércoles fuera a nivel ministerial y propuso que lideraran las delegaciones el ministro de Unificación de Seúl, Ryu Kihl-jae, y el director del Frente Unido del Partido de los Trabajadores norcoreano, Kim Yang-gon, respectivamente.

Por su parte, Corea del Norte descartó una cita ministerial y expresó su intención de enviar a otro "alto funcionario", indicó la portavoz de Unificación, por lo que finalmente la reunión será a nivel gubernamental y ni la agenda ni las listas de las delegaciones se han preparado.

El complejo de Kaesong es un macroproyecto industrial con capital surcoreano y mano de obra del Norte que permanece cerrado desde que en abril Pyongyang retirara a sus 53.000 trabajadores en plena campaña de hostilidades.

Además, es probable que busquen la reapertura del enclave turístico conjunto del Monte Kumgang, clausurado desde 2008, y el reinicio de los encuentros de familias separadas por la Guerra de Corea (1950-53), que no se producen desde finales de 2010.

Con información de EFE.