La dramaturga y directora de teatro, Mariana de Althaus, comentó el post publicado por Mil demonios en LaMula.pe en el que abordaba la problemática de la promoción del cine peruano a partir del caso de la película 'Las malas intenciones'.

En su comentario, De Althaus explicó que otros países protegen su cinematografía la cual convive con el cine hollywoodense o 'comercial' y negó que el teatro nacional sea un buen ejemplo para el futuro del cine peruano.

No estoy de acuerdo con ese señor. Muchos países tienen cuota de pantalla que protege su cinematografía de la pirotecnia hollywoodense, eso permite el desarrollo de un cine de autor, tan necesario como el "comercial". No todo es negocio, señor economista. Si todo el teatro y todo el cine empezara a considerarse como negocio, nos perderíamos de muchas cosas como "Don juan regresa de la guerra" (en teatro) o "La teta asustada" (en cine), por dar los ejemplos más extremos. Y, por si acaso, no hay boom de teatro peruano. La mayoría de obras que se ponen son textos extranjeros que ya tuvieron éxito afuera, pero eso no está generando un desarrollo de un teatro peruano, con propuesta, no fotocopias. Son cuatro gatos los que proponen algo, y siempre perdiendo su plata.

Sí hay un gran avance, hay más oportunidades para los que hacemos teatro, hay más público, sin duda. Y el teatro escrito en otras partes es genial, ver puestas de Brecht, Sabina Berman o Pinter dirgidos por excelentes directores peruanos y con impecable producción es un lujo. Pero el éxito del teatro peruano del que habla el señor economista de la Mula no es tan real, es cierto que se mueve más plata, pero es porque la mayoría de  productores se ven obligados a hacer lo que al público masivo le gusta para hacer un teatro rentable. En otros países hay un teatro comercial muy importante - y necesario, para mí - que convive con otro teatro off o alternativo que, igual de necesario, al menos en gran parte o en un inicio, es impulsado por políticas estatales o municipales. Se le llame o no boom, yo creo que lo que estamos viviendo en el teatro peruano está muy bien, pero no es un ejemplo para decir que el cine debería ir por el mismo camino.

Mariana de Althaus